martes, 27 de septiembre de 2011

Alturas imposibles

    
     Tenía que pasar tarde o temprano. Desfile de Versace SS'12. Plataformas de metacrilato como la de arriba y tacones de aguja con plataforma en el mismo material como el que viene a continuación.


     Lindsey Wixon jovencita tejana de 17 añitos que sale cual sirena de los mares de Donatella.



     Vestido largo en tela vaporosa, alturas imposibles en los zapatos, poca experiencia en pasarela... Sólo podía tener un resultado esta fórmula.

   
     Moza al suelo, show dentro del show, conseguir que se hable sólo de la caída de tu modelo en el desfile y que la colección pase a un segundo término.

     Cuando se está preparando un desfile y llega el momento del calzado, casi todos los diseñadores piensan de 15 cmts para arriba en la altura del tacón, sea la horma que sea, tenga o no sujeción, que se pueda andar con ellos o no. Después, viendo los primeros prototipos, si se cuestiona la practicidad de esos modelos a la hora de desfilar con ellos, casi siempre puedes escuchar la misma respuesta: "son modelos, saben andar con tacones". Por razones técnicas la altura del tacón tiene un límite a la hora de moldear hormas, calces, etc., para que se pueda caminar con ellos. Un zapato con un tacón excesivamente alto junto una horma que no sea cómoda ni segura a la hora de andar,  al desfilar tiene el 90% de probabilidades de que la chica vaya insegura. Si son incómodods nada más poner un pie fuera de pasarela, seguramente, se los quitará, por lo que en las fotos de backstage aparecerán con ellos en la mano haciendo una fantástica campaña de lo incómodo que son los zapatos. Aparte de todo esto, un zapato con mucho tacón y un quiebre excesivo no tiene porque favorecer especialmente, sino mirad las modelos de Roberto Cavalli para su colección SS'12.




     Reconozco que me gusta ver a una mujer con tacón, un empeine ligeramente quebrado por la altura del tacón me parece tremendamente elegante y sensual, pero si de ahí pasamos a que puedo ver perfectamente todos los huesos del empeine por lo quebrado que va el mismo creo que entramos en la vulgaridad y lo desagradable.

     Resumiendo, tacones si, andamios no.

     Que tengáis buen martes.

     Monsieur Pablo P..


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